Emprendimientos intergeneracionales: seniors y juniors se unen en un proyecto
Emprendimientos y formas de emprender son muchos y muy variados. Recientemente te he conversado, por ejemplo, sobre los emprendedores plateados, referido a quienes emprenden luego de estar en edad de retirarse, también te he conversado acerca de los emprendedores migrantes, referido a quienes emprenden fuera de su país. Siguiendo esa línea, hoy quiero conversarte sobre los emprendimientos intergeneracionales: cuando seniors y juniors se unen en un proyecto. ¿Cómo afecta esto al emprendimiento? ¿Cuáles son sus ventajas y desventajas? ¿Cómo optimizar esta relación para el éxito del negocio?
«Con frecuencia escuchamos acerca de salir de nosotros mismos, pero rara vez acerca de salir de nuestra generación»
Criss Jami
Si prefieres, puedes escuchar el audio completo del artículo en el siguiente enlace:
Sentimos afinidad con personas de nuestra generación
En general, solemos tener amigos que pertenecen a nuestra misma generación. Años más o años menos, nuestro grupo de personas más afines (fuera de nuestra familia) posiblemente son cercanos a nosotros en edad.
En algunos casos, esto es porque son nuestros amigos desde la época en que éramos estudiantes y como estudiantes lo más frecuente es establecer relaciones con personas de nuestra misma edad o cercana.
En otros casos es porque vamos compartiendo etapas similares de ciclo de vida. Son personas que estudian en la misma época, se casan y tienen hijos más o menos en períodos cercanos. Compartimos preocupaciones como padres, compartimos preocupaciones luego como cuidadores de nuestros padres. Las personas de nuestra misma generación tienden a tener ciclos de vida similares a nosotros.
A medida que avanzamos en la vida, el espectro de edad de nuestras relaciones cercanas se expande un poco. Bien sea a través de nuestra vida profesional, porque nos toca trabajar con equipos con personas mayores o menores que nosotros, o porque a medida que formamos nuestra propia familia y tenemos hijos comenzamos a confraternizar con otros grupos de edades, a través de sus propias relaciones.
Sin embargo, es frecuente que cuando decidimos emprender y decidimos buscar un socio para ese emprendimiento, el primer pensamiento se dirija a la búsqueda de personas de nuestra misma generación.
Posiblemente esto no es ni siquiera un pensamiento intencional. Nos sentimos más seguros al asociarnos con quienes tienen trayectos profesionales similares a los nuestros, que comparten valores y visión. Aquellos que comparten recursos, que están en un momento similar a nosotros en su ciclo de vida. Y hay mayor probabilidad de encontrar personas con características similares a nosotros dentro de nuestra misma generación.
¿Qué es el emprendimiento intergeneracional?
Hoy quiero conversarte acerca de otra opción para el emprendimiento en sociedad, y es lo que se conoce como emprendimiento intergeneracional, definido como el compartir conocimientos, destrezas, experiencias y recursos a través de asociaciones y colaboración entre personas de diferentes generaciones de edad.
La forma más frecuente que se conoce de emprendimiento intergeneracional, es aquella en la que los negocios familiares traspasan la batuta de una generación a otra.
Cuando los padres deciden integrar a sus hijos en el negocio, cuando los hijos quieren contribuir al crecimiento y desarrollo del emprendimiento que han conocido tal vez toda su vida, una vez que los padres quieren retirarse.
En esos casos, una de las formas de asegurar la continuidad del negocio es por vía de la transferencia a nuevas generaciones. En ese proceso, ocurren etapas en las que ambas generaciones se solapan en el manejo de las responsabilidades del negocio. Durante ese período de tiempo en que ambas generaciones permanecen activas en conjunto entonces hablamos de emprendimiento intergeneracional.
No obstante, y a pesar de que la mayor parte de las referencias que encontré tienen que ver con el emprendimiento intergeneracional que se origina por esta transferencia de negocios familiares, no necesariamente es la única forma en la que encontramos estas iniciativas.
A veces ocurren emprendimientos igualmente entre padres e hijos, pero no son transferencia de uno a otro, sino que nacen de la mano de ambos, como trabajo conjunto.
A veces surgen sociedades entre profesionales de diferentes generaciones que no son familia. Son simplemente socios. Pueden o no haber sido amigos antes de asociarse, pero aún perteneciendo a generaciones diferentes deciden emprender aventura juntos.
En cualquiera de estos casos, hay elementos comunes y característicos de la combinación que ocurre cuando seniors y juniors se unen en un proyecto.
¿Qué valor específico aporta cada generación cuando seniors y juniors se unen en un proyecto en un emprendimiento intergeneracional?
Leyendo e investigando para escribir este artículo, encontré una frase fantástica:
«Trabajo intergeneracional conecta pensadores con ejecutores»
Christa Ward
Es una frase del primer artículo de referencia que te comparto abajo.
Cada generación trae al negocio sus propias características que aportan valor. Son características diferentes y complementarias, que pueden conformar una fórmula ganadora. Y la frase anterior las resume de una forma hermosa.
¿Qué aportan los seniors?
Los seniors, los que pertenecen a la generación mayor en la fórmula: traen experiencia, visión, aprendizaje, know-how, valores fundamentales, legado, contactos, relaciones, anécdotas, recuerdos. Si se trata de una transferencia de negocio familiar, o alguna forma en la que la nueva generación se integra a un negocio establecido, aporta también un legado empresarial.
Los seniors es posible que tengan el paso más aplomado. No necesariamente más lento, pero si más cauto y menos impulsivo. Han aprendido las cosas que funcionan y las que no funcionan. Ya han madurado emocionalmente y saben reaccionar mejor, de forma asertiva y empática, a las situaciones difíciles. Han aprendido a esperar y saben por experiencia propia que el esfuerzo consistente si logra los objetivos
¿Qué aportan los juniors?
Los juniors, los que pertenecen a la generación más joven en la fórmula, traen fuerza, entusiasmo. Físicamente son capaces de aguantar mejor las exigencias del trabajo arduo. Están más abiertos a la innovación y al cambio porque se han apegado menos a formas específicas de hacer las cosas. Dominan mejor las nuevas tecnologías y tienen mejor manejo de medios sociales.
Los juniors es probable que quieran correr más rápido y asumir más riesgos. Son menos temerosos porque tienen más tiempo por delante para enderezar camino si las cosas no van bien. Posiblemente son más explosivos y pueden ser más emocionales en sus respuestas. Están más ansiosos por ver resultados rápidos.
¿Cómo conciliar estas diferencias y promover las fortalezas de cada uno?
La mejor forma de asumir los emprendimientos intergeneracionales es aprender a ver las diferencias entre seniors y juniors cuando se unen en un proyecto como un valor agregado y no como un motivo de estancamiento o desavenencia.
Los seniors que asumen el proceso de forma negativa sienten que hay disrupción en el orden, cambio de reglas. Los juniors que asumen el proceso de forma negativa sienten que hay resistencia al cambio y orgullo.
Cuando asumimos las diferencias de forma negativa, no importa si somos parte del grupo de seniors o de juniors en el emprendimiento internegeracional, nos enfocamos en defender nuestro punto de vista más que en conciliar. Nos enfocamos en hablar más que en escuchar. Y el negocio es el que sale afectado, en el mejor de los casos avanza lento. En casos extremos se estanca o desaparece.
Es necesario, entones, entender las diferencias y darles la bienvenida, como una bendición. Entender que una generación diferente a la mía aporta valores que yo no puedo aportar. En lugar de sentirme ofendido por ello, aceptar que somos diferentes unos de otros y somos diferentes de quienes nos precedieron y de quienes vienen después que nosotros.
Ser diferentes no obstaculiza el éxito
Hemos dicho muchas veces que la única constante es el cambio, de modo que no podemos esperar que quienes nos precedieron o quienes nos siguen piensen igual que nosotros, puesto que les ha tocado crecer en momentos históricos diferentes.
Debemos entender que ser diferentes no es obstáculo para el éxito, sino que, muy por el contrario, nos puede ayudar a construir un negocio más sólido.
Para ser exitosos en una visión positiva de aceptar nuestra diferencias generacionales y apalancarnos en ellas debemos hacer un esfuerzo consciente por conocer y aceptar nuestras propias fortalezas y debilidades. Conocer y dar la bienvenida a las fortalezas y debilidades del otro, con humildad y apertura. Y encontrar la forma en que mejor podemos utilizar las fortalezas de cada uno para superar o minimizar las debilidades, en beneficio del emprendimiento.
¿Cómo beneficia una sociedad intergeneracional a un emprendimiento?
1- Diversidad de ideas.
Aceptando que existirán diferencias entre las generaciones involucradas, en general la diferencia de pensamiento, bien manejada, conduce a mayor diversidad de ideas. La diversidad de ideas abre los ojos a nuevas oportunidades, nuevas formas de hacer las cosas, y permite descubrir formas de innovar que generen ventajas competitivas para nuestro negocio.
2- Amplitud de alcance del negocio.
En muchas ocasiones los mismos mercados también son intergeneracionales. Tener socios de generaciones diferentes contribuye a asegurar una comprensión más exhaustiva de mayores segmentos del mercado pudiendo expandir la oferta de productos y servicios a mayores segmentos entendiendo claramente sus necesidades.
3- Adecuado uso de las capacidades de cada socio.
Esto debe ocurrir en cualquier emprendimiento en el que haya sociedad, no solo cuando la misma es intergeneracional. Sin embargo, en este caso se hace aún mucho más evidente la necesidad.
En el caso del emprendimientos intergeneracional, cuando los seniors y juniors se unen en un proyecto y entienden cuáles son sus propias debilidades y fortalezas, el negocio se beneficia y fortalece, surgiendo como una entidad más sólida.
Este es uno de esos momentos en los que el principio básico de la escuela de la Psicología de la Gestalt cobra mucho sentido: «El todo es más que la suma de sus partes».
En última instancia, el objetivo principal del emprendimiento intergeneracional es asegurar la renovación, crecimiento y supervivencia de las empresas, promoviendo la diversidad de pensamiento, de visión y de recursos, al tiempo que se apoya en la integración adecuada de los mismos.
Algunos consideran que los emprendimientos intergeneracionales, en los que seniors y juniors se unen en un mismo proyecto, es una tendencia poderosa que va a dinamizar los negocios en el futuro.
¿Es tu negocio un ejemplo de emprendimiento intergeneracional? Cuéntanos en tus comentarios qué otros problemas has enfrentado a causa de esto, cómo los has superado y cómo crees que esta configuración particular de sociedad ha beneficiado a tu negocio. Nos interesa aprender de ti.