No te cases con tu emprendimiento si no estás enamorado

Pasión por tu emprendimiento

Piensa lo difícil que te resultaba, durante tu infancia, hacer alguna tarea de tu casa que te disgustaba o te aburría. Lo hacías porque era tu obligación o porque no hacerlo podía tener consecuencias desagradables. Sin embargo, no lo disfrutabas. Esa tarea desagradable y aburrida puede haber sido diferente para cada persona, pero seguramente hubo algo en tu infancia que no te gustaba hacer. Sin embargo, estoy segura de que también había algunas tareas u obligaciones que te resultaban placenteras y que las hacías con gusto, aunque fueran impuestas. Muchos hermanos tienden a intercambiar tareas en la casa, cuando las que desagradan a uno agradan al otro y viceversa. Hoy vamos a conversar acerca de la importancia de sentir pasión por lo que haces.


“Elige un trabajo que te guste, y no tendrás que trabajar ni un solo día de tu vida”

Confucio


Durante nuestro tiempo de estudiantes, esto aplicó por igual a las materias que nos tocó estudiar. Con algunas, no nos importaba pasar mucho rato leyendo o practicando, mientras que otras se nos hacían pesadas y difíciles.

Cuando iniciamos nuestra vida profesional, nos encontramos posiblemente con la misma situación. Hubo actividades de nuestro trabajo que disfrutamos e hicieron que el tiempo pasara rápido y con alegría y otras que nos desagradaban.

Estos hechos nos demuestran tres cosas:

  1. No todos disfrutamos hacer lo mismo.
  2. Siempre hay algo que disfrutamos más hacer que otras cosas.
  3. Hacer lo que nos gusta nos resulta más sencillo y placentero.

Selecciona emprendimientos en áreas que te gusten.

Cuando decidimos emprender nuestro propio negocio, es indispensable tomar en cuenta estos hechos. Si queremos optimizar las probabilidades de que nuestro emprendimiento tenga éxito, es necesario que el mismo se apalanque en actividades que disfrutamos hacer y por las que sentimos pasión.

La pasión por lo que haces te mantiene motivado, aún en momentos de dificultad.

En un artículo anterior en el que converso sobre los valores del emprendedor exitoso, te contaba que el primer valor que necesitas para optimizar las probabilidades de éxito de tu negocio es la Pasión. Puedes leer o escuchar este artículo que te refiero en el siguiente enlace: 9 valores del emprendedor exitoso.

Asegúrate de trabajar sobre tus propias competencias personales, aquello que sabes hacer.

Generalmente, las cosas que disfrutas van de la mano de las áreas en las que eres bueno, o te destacas. Tus fortalezas, con frecuencia (aunque no siempre), corresponden con tus pasiones. En todo caso, aunque es posible que tengas fortalezas en áreas que no te gusten o que disfrutes áreas en las que no eres bueno, trata de seleccionar el área de tu emprendimiento en donde ambas cosas confluyen:

Emprende en un sector de actividad económica que te apasione y para el que tienes talento.

Si logras encontrar esa llave, tienes un primer gran paso asegurado para iniciar un negocio con probabilidades de salir adelante. No significa que no tendrás dificultades. Tampoco significa que será fácil. Pero si significa que la pasión por tu emprendimiento te ayudará a perseverar y a ser resiliente.

Si hay cosas que disfrutas hacer, pero para las que no tienes talento o te cuesta demasiado dominarlas con calidad, tienes dos opciones: 1) No te dediques a ellas como un negocio o emprendimiento sino como una afición o, 2) Si insistes en tener un emprendimiento en esa área, asegúrate de asociarte con alguien que tenga un fuerte dominio y talento para ese tema.

Busca apoyo en personas que compartan tu mismo interés.

La pasión es contagiosa. Cuando te rodeas de personas que comparten tu pasión, el entusiasmo de cada uno alimenta el de los demás y mantiene viva la llama del entusiasmo.

Es necesario que estés enamorado de tu negocio. Cuando sientes esa pasión o gran amor por tu emprendimiento, te resulta sencillo transmitir ese entusiasmo.

Si te rodeas de personas que comparten tu pasión y muestras abiertamente tu amor por lo que haces, es mucho más probable que consigas socios que trabajen a la par contigo en la consecución de un sueño común, colaboradores que trabajen por tu proyecto como si fuese de ellos, clientes que crean en tus ideas y quieran adquirir tus productos y servicios y proveedores que estén dispuestos a trabajar contigo en las condiciones que más beneficien a ambos.

Cuando las personas que te rodean, tus clientes potenciales, tus empleados, tus socios, tus proveedores, no comparten tu entusiasmo, motivarlos a usar tus productos y servicios es muy cuesta arriba. Es como arrastrar una carreta pesada.

No significa que esas personas son malas. Sencillamente no son las personas adecuadas para compartir tu camino con ese emprendimiento.

Revisa cómo seleccionas tus colaboradores, cómo has definido tu cliente ideal, de cuáles fuentes obtienes tus materias primas. Trata de que todo esté alineado, para que sea más sencillo mover la carreta en una misma dirección.

Apaláncate en tu conocimiento previo

Es importante que selecciones emprendimientos en áreas sobre las que tengas ya conocimientos previos. No solamente que te gusten, sino que conozcas en alguna medida.

Iniciar emprendimientos en sectores completamente nuevos para ti, aunque te gusten mucho, puede ser un poco difícil, aunque no imposible.

Esto no significa que no puedes aprender en el camino. De hecho, el amor por el aprendizaje y hábito de estudio constante es fundamental para todo emprendedor (Puedes leer un artículo anterior sobre la importancia del aprendizaje continuo en este enlace: Aprendizaje continuo, el día a día del emprendedor). Siempre vas a crecer y aprender cada día en que estés inmerso trabajando por su sueño.

Sin embargo, cuando te enfrentas a un terreno totalmente nuevo para ti – sin importar cuán atractivo te parezca – desconoces muchos elementos técnicos que te ayudarán a ofrecer productos y servicios de calidad. Desconoces muchos elementos que pueden impactar tu negocio. Desconoces incluso si la atracción que sientes hacia el mismo es una pasión real o solo un entusiasmo pasajero.

Por eso, es recomendable que te apalanques en temas que conozcas, que domines, y sobre los que sepas con certeza que disfrutarás cada día y tienes una base de experiencia que aportar desde el inicio.

Piensa en tu emprendimiento como en un matrimonio.

Cuando te enamoras de alguien y deseas pasar la vida con esa persona, es necesario que exista una pasión y atracción entre ambos. Esta pasión no se puede forzar. No puedes obligarte a amar a alguien, sencillamete ocurre. De la misma forma, no puedes obligarte a sentir atracción por un tema o por un negocio.

Por otro lado, si quieres que tu matrimonio dure, es necesario que te asegures que conoces a tu pareja, en las buenas y en las malas, antes de comprometerte para siempre.

Y por último, amar a alguien y conocerlo no te garantiza una vida de armonía eterna y sin conflicto; siempre habrá desavenencias y momentos de frustración, pero si realmente amas a tu pareja y la conoces a profundidad, encontrarás que la motivación para seguir juntos es más fuerte que cualquier momento de desacuerdo.

Cuando te cases con tu emprendimiento, utiliza el mismo razonamiento y te auguro una larga y feliz unión.

La pasión por tu emprendimiento es una fuente inagotable de motivación. Asegúrate de que sea parte integral de cualquier negocio que inicies.

Foto de Depositphotos

Referencias