10 consejos para conciliar tu maternidad y tu emprendimiento

conciliar maternidad y emprendimiento

Estamos en mayo. Es un mes muy lindo, que se asocia con cosas positivas: el mes de las flores, el mes de la virgen y en muchos de nuestros países es el mes de las madres. En honor a las madres quiero dedicar el artículo de hoy a las madres emprendedoras. A las mujeres que se han atrevido a llevar adelante un emprendimiento aún teniendo las responsabilidades de sacar adelante a sus hijos. En honor a todas esas madres emprendedoras, hoy te comparto 10 consejos para conciliar tu maternidad y tu emprendimiento.


Si prefieres, puedes escuchar el audio completo del artículo en el siguiente enlace:


«Mis hijos no son ancla, son motor»

Betsy Eslava

Muchas mujeres deciden emprender luego de que han sido madres, pensando que es una estrategia que les permite desarrollar su rol profesional y generar ingresos, al tiempo que pueden disfrutar de mayor libertad y tiempo para estar con sus hijos. Otras, ya son emprendedoras y deciden que ha llegado el momento de hacer crecer su núcleo familiar, razón por la cual su nuevo rol como madre se une a su rol como emprendedora. Bien sea que fuiste madre o emprendedora primero, si en este momento compartes ambos roles, estos 10 consejos son para ti, y los he preparado para ayudarte a conciliar tu maternidad y tu emprendimiento.

Yo soy madre. Tengo tres hermosas hijas que ya han tomado su propio camino, personal y profesional. Tienen sus propias familias y sus carreras. Pero cuando mis hijas eran pequeñas ya yo era emprendedora y me tocó aprender a lidiar con ambos roles. Por eso, me identifico totalmente contigo si estás viviendo esa experiencia, y quiero compartirte algunas cosas que aprendí en ese proceso y me fueron de utilidad para lograr con éxito ambas tareas.

Madre y emprendedora: SI SE PUEDE

Porque sé por experiencia propia que ser mamá y emprendedora al mismo tiempo es difícil, pero definitivamente SI SE PUEDE. Es posible hacerlo, y hacerlo bien.

En inglés, de hecho, hay un término para referirse a las mujeres que combinan su rol de madre, con el de emprendedora: Mompreneur. Este término define a las mujeres de negocio que desean lograr un equilibrio entre ambos roles y los siguientes 10 consejos te ayudarán a conciliar tu maternidad y tu emprendimiento.

1- Entiende tu propósito y transmíteselo a tus hijos

Es indispensable que tú misma estés muy clara respecto a la razón por la cual has decidido asumir ambos roles. Tu emprendimiento, independientemente de tu rol como madre, tiene un objetivo y una finalidad en tu vida. Posiblemente tiene que ver con tu realización profesional, tu deseo de ayudar a tus clientes, de trascender a través de tu trabajo, de poder generar ingresos suficientes para tener una calidad de vida que deseas.

Mientras más clara estés en este propósito, más fácil te va a resultar superar la culpa que aparece cada vez que sientes que tu emprendimiento interfiere con tu rol de madre. En la medida en que te enfoques en tu propósito y tengas la visión a largo plazo, te será más fácil superar la culpa del momento. Y para trabajar mejor este proceso, es importante que compartas con tus hijos ese propósito. Una vez que tienen suficiente uso de razón para entenderlo, explícales por qué tienes tu emprendimiento y por qué eso es algo positivo en su vida. Explícales que trabajas por ellos, por su futuro.

2- Acepta que no siempre se puede evitar la culpa

La culpa es una de las principales constantes en la mamá emprendedora. La culpa de no estar presente todo el tiempo, de tener sacrificar momentos con tus hijos por atender tu negocio. Cuando mi hija Andrea tenía dos años, además de trabajar en mi emprendimiento yo estaba estudiando mi MBA. Como te puedes imaginar, mi tiempo estaba sumamente ocupado. Recuerdo que un día Andrea se me plantó delante y me preguntó: “Mami, ¿Cuándo vas a poder pasar todo un día en casa, sin ir a la oficina ni a la “uvisidad” (por universidad)”? Por supuesto, esa pregunta me desmoronó en el momento. La culpabilidad que sentí fue mayúscula.

Sin embargo, entendí que la única forma de superar ese momento era aceptar esa culpa y entender que iba a convivir conmigo por un tiempo. Claro, siempre busqué estrategias para lograr maximizar el tiempo con mis hijas y minimizar la culpa. Pero también aprendí a convivir con cierto nivel de culpa sin sentirme consumida ni derrotada por ello. Aprendí a entender mi culpa y aceptar a mi culpa. Debes aceptar que esa culpa es algo necesario para lograr tu propósito a más largo plazo, que no solo va a satisfacer tus necesidades personales, sino que se convierte en un beneficio para tu familia, para tus hijos.

3- Construye un sistema de apoyo en tu casa

No intentes hacer todo sola. Es muy importante que generes un equipo de apoyo no solamente para tu rol de emprendedora sino para tu rol de madre. No significa delegar tu maternidad. No significa olvidarte de pasar tiempo son tus hijos. Pero si significa tener la tranquilidad de que, si requieres un día atender una reunión o una emergencia, cuentas con alguien que puede apoyarte. Alguien a quien tus hijos conocen y con quien se sienten cómodos.

Por supuesto, lo principal es apoyarte en tu pareja, si la tienes. Trabajar juntos para atender las necesidades de los hijos es el escenario ideal. Sin embargo, no siempre es factible. A veces porque somos madres que debemos sacar solas adelante a nuestros hijos, y a veces porque nuestras parejas tienen sus propias responsabilidades profesionales y no siempre es posible que el engranaje entre ambos sea perfecto. Ocurre que a veces los dos deben ausentarse de casa y es importante contar con personas, bien sea de la misma familia, amigos, o empleados, a quienes podamos dejar con confianza y tranquilidad a cargo de nuestros hijos durante los ratos que debemos ausentarnos por motivo de nuestro emprendimiento.

4- Elije tu equipo en tu trabajo

Igualmente, debes desarrollar equipo en tu emprendimiento. Si eres lo que se llama un “solopreneur” te va a resultar mucho más difícil, ya que todas las responsabilidades y tareas recaerán en tus hombros. Pero si tienes en quién delegar ciertas tareas, bien sea un socio, empleado o proveedor externo, tendrás mayor tranquilidad y confianza al momento en que debas dejar tu trabajo para atender tus responsabilidades y compromisos como madre.

5- Organiza tu tiempo y planifica

Si para el emprendedor en general es importante aprender a gestionar su tiempo, para las madres emprendedoras es vital. Haz uso de todas las herramientas que sean necesarias para organizar tus compromisos y responsabilidades, tanto de trabajo como de tu rol como madre. Visualiza todo como un solo entorno, para que puedas incorporar ambos roles en el tiempo de una sola persona. Tienes dos roles, pero eso no duplica tu tiempo, de modo que te conviene visualizar el tiempo integrando ambos roles. Utiliza todos los recursos de planificación y recordatorios que sean necesarios y que te ayuden a hacer el uso más eficiente del tiempo con que cuentas. Trabajar con agendas integradas es una forma clara de conciliar tu maternidad y tu emprendimiento.

6- Involucra a tus hijos en tu emprendimiento

Si tu emprendimiento te lo permite, es una buena estrategia tratar de integrar a tus hijos en tu emprendimiento. Puedes asignarles algunas tareas pequeñas, sencillas, siempre adaptadas a su edad y nivel de desarrollo. El sentir que te ayudan, además de permitirles pasar tiempo contigo mientras las realizan, les ayuda a entender un poco más en qué consiste tu emprendimiento. Si forman parte del proceso, ellos se sienten más involucrados y tú logras reducir la sensación de culpa. Es una forma excelente de integrar, literalmente, ambos roles. Por supuesto, es claro que esta estrategia no es factible para todos los emprendimientos ni para todos los hijos, pero si es algo que calza dentro de tu situación personal créeme que te será de mucha ayuda.

7- Nunca sacrifiques actividades que sean importantes para ellos

Mientras mis hijas estaban pequeñas, siempre hice un esfuerzo enorme por priorizar mi rol de madre cuando se trataba de actividades y compromisos que eran importantes para ellas. Cosas como llevarlas al pediatra, fue algo que muy pocas veces delegué, por ejemplo.

Preferí siempre cambiar una reunión, postergar un proyecto o delegar una tarea, antes de dejar de llevarlas yo personalmente. Cosas como reuniones con maestros y profesores, entregas de notas, recitales, presentaciones. Ayudarlas a veces a prepararse para algún examen o atender alguna tarea especial. Cualquier compromiso que involucrara algo en lo que ellas habían trabajado duramente y querían compartir conmigo, debía formar parte de mi prioridad.

Y no solo por ellas, sino porque eran cosas que yo realmente quería hacer. La posibilidad de perderme alguno de esos eventos era para mi inconcebible. Por supuesto, siempre hay excepciones y hay que tener la flexibilidad para aceptar que en ocasiones hay que priorizar por el trabajo, pero trata que esas excepciones sean poco frecuentes y que la norma sea acompañar a tus hijos en esos momentos.

8- Haz que tus hijos sientan orgullo por tu trabajo

Al explicarles a tus hijos tu propósito e involucrarlos en tu emprendimiento, logras que ellos entiendan la importancia de lo que haces. Trata de lograr que ellos sientan orgullo por tu trabajo. Que sepan que a través de tu trabajo ayudas a otros de alguna manera. Explícales que tu emprendimiento tiene una misión y que la misma trasciende a tu familia y a tu necesidad de ingresos. Que forma también parte de tu realización como persona y como profesional.  Buscando la frase con la que siempre inicio mis artículos, me topé con una frase para la que no encontré autor, de modo que la publico anónima, pero que me encantó y describe perfectamente esto: “Hazlo, porque tus hijos necesitan una madre de la cual poder alardear”. Si conoces el autor a quien atribuirla, por favor déjamelo saber en los comentarios.

9- Genera tiempo de calidad más que cantidad

El tiempo que les dediques a tus hijos, aunque sea corto, que sea de atención plena. Trata de no atender temas de trabajo mientras estás con ellos, por ejemplo, jugando o ayudándolos en sus tareas. Que tus hijos sientan que el rato que les dedicas es tiempo de calidad.

Yo con frecuencia trabajaba lo que yo llamaba “mi tercer turno”. Mis hijas salían del colegio a las 4:15 de la tarde. Eso significaba que mi día de trabajo en la oficina generalmente lo organizaba para que terminara a las 3:45, para poder ir a recogerlas y llevarlas a casa. Desde ese momento, hasta que se iban a la cama, trataba (en lo posible) de ocuparme de ellas, sus tareas, sus juegos, sus amigos, sus compromisos.

Pero entonces, después de las 9 de la noche muchas veces me tocó sentarme a trabajar y terminar lo que normalmente hubiera atendido entre 3:45 y 6:00, horario en que no estuve en la oficina. Eso significaba que muchas veces tuve que trabajar ese tercer turno hasta pasadas las 11 de la noche. Sin embargo, lo hacía tranquila, sabiendo que había atendido mi rol de madre de la mejor manera.

10- Tomate tiempo para ti

Por último, te invito a que trates de escaparte a veces de ambos roles, el de madre y el de emprendedora, y dediques tiempo a ti misma. Algunas veces, la mejor forma de conciliar tu maternidad y tu emprendimiento es no atender ninguno de los dos por un rato. Es importante que encuentres un tiempo para ti misma. Para descansar, para mimarte con lo que te guste, sea ir al salón, darte un masaje, ir a cenar con tu pareja o al cine con tu amiga. Desconectarte de ambos roles por un rato no te convierte en mala madre ni en mala emprendedora. Al contrario, te recarga con fuerzas para afrontar ambos roles de la mejor manera.

¿Alguna otra cosa que haya funcionado para ti? Compártela en los comentarios para que pueda ser de utilidad a otras mujeres guerreras que buscan conciliar su maternidad y su emprendimiento.

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