Independencia del emprendedor: cómo ayuda la autonomía de pensamiento y acción

Independencia del emprendedor

Recientemente te comenté que me certifiqué en la administración del EMP Entrepreneurial Mindset Profile – Perfil de la mentalidad emprendedora. Es una herramienta que permite ver tu perfil en 7 dimensiones de personalidad y 7 dimensiones de destrezas, comparadas con normas para emprendedores y para gerentes. Una de las dimensiones de personalidad en la que se evalúa a las personas es su “independencia”, entendiéndose como el nivel en el que prefieren tener la libertad de establecer su propia dirección. Hoy vamos a conversar acerca de la independencia del emprendedor, qué significa y cómo desarrollarla.


“Independencia no es hacer tus propias cosas, es hacer por ti mismo lo que es correcto”

Kim John Payne

Si prefieres, puedes escuchar el audio completo del artículo en el siguiente enlace:


Por definición, entendemos que el emprendedor es independiente, puesto que trabaja por su cuenta, es independiente profesionalmente de cualquier otra organización o empresa. Igualmente, se entiende que es independiente financieramente, puesto que genera su propio ingreso a través de su emprendimiento.

Estas dos definiciones de independencia del emprendedor son inherentes a la actividad de emprender. Sin embargo, no es a esto a lo que me quiero referir hoy.

No basta con declararse independiente

Solo por el hecho de decidir emprender por tu cuenta y trabajar de forma independiente, no garantizas que efectivamente tienes la mentalidad adecuada para comportarte y proceder responsablemente con atributos de independencia, a fin de garantizar el éxito del emprendimiento.

Imagina un adolescente que decide ser independiente y dejar la casa de sus padres para vivir por su cuenta. Efectivamente, el mero hecho de mudarse solo lo convierte en una persona independiente. Sin embargo, no es suficiente hacerlo.

Es necesario pensar como una persona independiente, comportarse como una persona independiente, para que este adolescente logre una vida sana y exitosa en esta nueva etapa de su vida. Si sigue esperando que alguien tome decisiones por él, o que alguien se preocupe por pagar sus cuentas, porque esté bien alimentado o por limpiar su casa, realmente no es independiente, únicamente vive solo, pero sigue siendo dependiente de otros.

Entonces, es a estos elementos que nos vamos a referir hoy. Aquellos aspectos internos que definen una mentalidad de alguien independiente. Es posible que ya cuentes con estos atributos. Es posible que te haga falta algo. La buena noticia, es posible entrenarte para que mejores tu capacidad de actuar de forma independiente.

Trazarnos metas propias y perseguirlas

Ser independiente implica la capacidad de establecernos metas propias y disciplina para hacer lo necesario para alcanzarlas sin necesidad de que alguien nos controle para asegurar que estamos haciendo lo correcto.

Tomar decisiones propias

La motivación principal de muchos emprendedores es poder tener la capacidad de tomar decisiones por su cuenta y la flexibilidad de utilizar el tiempo de trabajo y personal con libertad.

Tomar decisiones por cuenta propia da ciertamente una sensación de libertad. Sin embargo, en ocasiones puede ser un peso y una gran responsabilidad. Al tomar decisiones de acuerdo con nuestro criterio estamos al mismo tiempo asumiendo las consecuencias que acarrea cada decisión. Esperamos que dichas consecuencias sean positivas y beneficiosas, pero sabemos que lamentablemente no siempre es así.

Ser independiente, entonces, significa ser capaz de asumir responsabilidad sobre las consecuencias, buenas y malas, de las decisiones que tomamos.

Seguir nuestras propias órdenes y normas

No tener un jefe que nos de órdenes es también muy agradable. Nos sentimos libres porque nadie nos “manda”, nadie nos dice qué hacer. Sin embargo, para que el emprendimiento avance, es necesario que nosotros mismos seamos quienes nos demos órdenes.

Cuando eres independiente, tú estableces las reglas. Para esto, es necesario que te conozcas adecuadamente y sepas lo que te conviene, lo que te agrada, lo que te desagrada y lo que estás en capacidad de hacer. Si marcas las pautas, debes seguirlas.

Trabajar por voluntad propia

En general, cuando tenemos una tarea pendiente, no nos gusta que nos estén insistiendo en que debemos hacerlo y nos micro gerencien. Nos gusta avanzar a nuestro ritmo y hacerlo cuando pensamos que es conveniente. Ser independiente significa que nadie controla lo que hacemos.

Sin embargo, esto acarrea un riesgo de procrastinar y no ejecutar. Cuando actuamos y pensamos de manera independiente, logramos desarrollar la disciplina necesaria para exigirnos a nosotros mismos el esfuerzo que requiere el cumplimiento de la meta.

¿Qué tan independiente eres?

El EMP (Entrepreneurial Mindset Profile) mide, entre otras dimensiones, el nivel de independencia de una persona y lo compara con normas para emprendedores y gerentes corporativos. Te permite ver si tu puntuación en esta dimensión es superior, similar o inferior a las mostradas por otros emprendedores.

Las personas que obtienen una puntuación alta en esa dimensión prefieren contar con la libertad de establecer su propia dirección. Prefieren trabajar en situaciones en las que nadie les está imponiendo lineamientos o apoyo. Se sienten capaces de decidir por si mismos cuáles son sus prioridades y cuál es el enfoque adecuado para enfrentar una tarea.

Ser excesivamente independiente puede también ser un problema para el emprendedor. Puede acarrear el riesgo de ser percibido como polémico o rebelde y como alguien que no sabe trabajar en equipo, en particular en situaciones cuando es necesario que otra persona asuma la dirección.

¿Cómo ser más independiente?

Si deseas desarrollar tu capacidad de trabajar de forma independiente, para beneficiar tu emprendimiento, hay algunos lineamientos que pueden ayudarte a lograrlo:

1- Conocerte a ti mismo

Conocer tus fortalezas y debilidades. Mientras más te conozcas a ti mismo, te resultará más fácil desarrollar la confianza necesaria para seguir tus propios lineamientos, porque confiarás en que los has desarrollado de manera de apalancarte en tus fortalezas y minimizar, o superar, tus debilidades.

2- Ser capaz de automotivarte

Busca maneras que te permitan mantener el esfuerzo por tu propia voluntad. Si no cuentas con la autodisciplina, permítete pequeñas recompensas al lograr tus metas. Busca siempre las condiciones en las que te resulte más fácil y entretenido asumir las tareas que debes asumir, para que el esfuerzo requerido sea menor. Y cuando esto no sea posible, enfócate en el resultado, como motivación final para continuar.

3- Tener madurez emocional

Para ser independiente requieres ser capaz de manejar las dificultades, los rechazos y los fracasos de forma constructiva. Sin desesperarte, sin atacar a otros, sin molestarte y sin desanimarte.

4- Tener confianza en ti mismo

Para ser independiente es indispensable que tengas la certeza de que tienes la capacidad para alcanzar tus objetivos y la seguridad de que tus objetivos son relevantes, valiosos y realizables. Si los demás no creen en tu proyecto, la confianza en ti mismo te ayuda a trabajar por ti mismo, independientemente de las opiniones de los demás. Puedes leer un artículo anterior sobre la autoestima en el siguiente enlace: El rol de la autoconfianza en el éxito del emprendedor.

5- Desarrollar tu creatividad

Cuando eres independiente no puedes esperar que otros te den sugerencias para resolver las situaciones que confrontes cada día. Debes desarrollar por ti mismo la habilidad de generar ideas y trazar planes que te conduzcan al éxito. Muchas veces, esos planes no son evidentes y necesitas ser creativo y flexible para encontrar el camino adecuado. Eso te ayudará a improvisar adecuadamente cuando sea necesario.

6- Saber cuándo pedir ayuda

Ser independiente no significa ser solitario o antisocial. Puedes trabajar en equipo, pedir ayuda, delegar. El hecho de ser independiente no te convierte en alguien que sabe todo, domina todo. Significa que tienes la capacidad para decidir cuándo una tarea te queda grande, o te tomará mucho tiempo, o te costará mucho tiempo o dinero hacerlo tú mismo y, por ende, necesitas apoyo.

La independencia del emprendedor trae consigo muchas libertades, pero al mismo tiempo acarrea muchas responsabilidades. ¿Estás listo para ser independiente?

Si quieres saber qué tanto tienes desarrollado este rasgo de independencia en comparación con las normas para emprendedores y gerentes, y si quieres conocer tus fortalezas y debilidades y desarrollar un plan para mejorar en este sentido, te invito a considerar la realización del EMP (Entrepreneurial Mindset Profile – Perfil de Mentalidad Emprendedora), para una evaluación personalizada.

Referencias

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