Mi plan esencial de negocio ¿el por qué de tu emprendimiento? – Parte 1

Mi plan esencial de negocio por qué

En el último artículo, conversamos acerca de la importancia de tener un plan de negocios y los lineamientos generales de un plan que llamamos “Mi plan esencial de negocio”, que constituye una versión muy simplificada con la información mínima que debes poder conocer y organizar sobre tu emprendimiento y tu mercado, para que puedas planificar con éxito. Si no has leído ese artículo, puedes leerlo en este enlace. Hoy comenzaremos por responder la primera pregunta de ese plan, el ¿Por qué? de tu emprendimiento.


«Visión es el arte de ver las cosas invisibles»

Jonathan Swift


Como prometí en ese momento, en este artículo de hoy y los tres que le seguirán, conversaremos un poco más en profundidad sobre las diferentes secciones del Plan Esencial para que tengas las directrices adecuadas para preparar el tuyo.

Si no alcanzaste a descargar el formato para el Plan Esencial, puedes hacerlo ahora en este enlace:

Hoy, entonces, nos centraremos en la primera pregunta del plan esencial de negocio: ¿Por qué?

Esta sección es fundamental y constituye el alma o la esencia de tu emprendimiento. Es algo que con toda seguridad ya existe de forma más o menos clara en tu mente y en tu corazón, pero tal vez requiere de un empujón para poder transferirse a un texto concreto.

Pero, quiero primero darte algunas sugerencias respecto al entorno y momento en que serás más productivo cuando te decidas a hacerlo:

  1. Siéntate a llenar esta primera pregunta del formato cuando tengas al menos una o dos horas disponibles, sin interrupciones, sin otros compromisos. Trata de dedicar un rato continuo a esta tarea, para que sea realmente productivo.
  2. Busca un lugar que te resulte cómodo e inspirador. A veces, nuestro lugar de trabajo usual es lo que necesitamos. Pero otras veces, cambiar el entorno puede ayudar para abrir la mente y atraer a la inspiración. Si este es el caso, cambia tu lugar habitual, sal de tu casa u oficina, ve a un café, a un parque. En todo caso, lo importante es que te asegures de estar cómodo y con agrado.
  3. No juzgues lo que sale cuando escribes. Siempre comienza escribiendo lo que te viene a la mente y luego edita y cambia. No te inhibas. Esto será inicialmente un borrador solo para ti (hasta que tú lo sientas completo y decidas compartirlo con alguien), de modo que siéntete en total libertad de escribir y de fallar varias veces hasta que logres la idea que realmente describe lo que deseas.

Ninguno de los cuatro puntos que trabajaremos hoy deben ser extensos. En cada caso, lo que debes producir es una frase o una lista de palabras. Algo muy concreto y sencillo.

Desde el comienzo te sugiero que le pierdas miedo a escribir. Cuando era chica me decían, “Escribe, que el papel aguanta”. Bien sea que lo hagas escribiendo a mano, en un papel, o que lo hagas digitalmente en tu computadora, permite que las palabras salgan como quieran. Escribe lo que vayas pensando y luego edita, organiza, borra, tacha, cambia todo lo que desees hasta que te sientas satisfecho.

Ok. Si ya estás cómodo, vamos a revisar los cuatro puntos que incluye la sección del “¿Por qué?”:

  1. Problema que resuelvo
  2. Misión
  3. Visión
  4. Valores

Problema que resuelvo:

En esta sección, debes describir brevemente qué situación / oportunidad existe en el mercado y tu producto o servicio viene a resolver. Por ejemplo, si prestas servicio de reparación de computadoras, tu problema puede ser

“Los usuarios de computadoras no tienen el conocimiento técnico para reparar sus equipos cuando los mismos les fallan y requieren asistencia confiable y rápida, porque su computadora es una herramienta de trabajo”.

El ejemplo anterior, establece la necesidad y al mismo tiempo está definiendo algunos aspectos de una posible ventaja competitiva. Muchos negocios brindan asistencia en reparación de computadoras, pero no todos logran resolver el problema de forma confiable ni sienten empatía y o comprenden el sentido real de urgencia que sus clientes tienen al momento de entregarles su computadora.

Algunas veces, como en el ejemplo que te acabo de colocar, el problema es más o menos evidente. Sin embargo, otras veces puede ser muy sutil, o no ser realmente un “problema” como tal.

Por ejemplo, pensando en mi propio microemprendimiento en el área de diseño de joyas, realmente las mujeres no tienen un “problema” que resuelvan con una joya, pero pensando fuera de la caja podemos encontrar oportunidades interesantes. Por ejemplo, en mi caso, que ofrezco joyas hechas a mano, únicas, inspiradas en el Caribe, el problema podría definirse como:

“Las mujeres en ocasiones desean sentir la calma y calor de unas vacaciones en El Caribe en cualquier momento del año”.

Este problema en particular no implica que mi cliente requiere una joya, sino que se refiere a una necesidad de un estado de ánimo, unas emociones o sensaciones, que puedo ofrecerle a través de mis diseños, colores y materiales.

Misión:

La misión constituye la razón fundamental de ser del negocio. Es la forma en la que tu emprendimiento en particular pretende responder al problema que acabas de describir. La razón por la que tu producto o servicio existen.

La misión describe tu presente. Lo que haces. Quién eres y a quién sirves, a través de qué producto o servicio. En una declaración del propósito de tu empresa.

El objetivo de la misión es: Informar: ¿Qué hacemos, a quién, cómo y por qué?

Por ejemplo, en el caso de mi emprendimiento de joyas, la misión la definí como:

“Fabricar y comercializar piezas de joyería modernas y de alta calidad, combinando técnicas de alta tecnología con la precisión y el cuidado de la terminación a mano, para ofrecer piezas elegantes y únicas que reflejan el balance entre la calma y la fuerza características del espíritu del Caribe”.

Esta frase describe lo que hago (fabricar y comercializar joyas), cómo lo hago (tecnología y cuidado) y establece mi propuesta de valor particular (piezas elegantes y únicas que reflejan el Caribe).

Visión:

La visión describe tu sueño. Lo que deseas que tu emprendimiento llegue a ser. Establece una expectativa del ideal hacia dónde te diriges.

La visión describe tu futuro. Lo que quieres ser. Es una declaración de la aspiración de tu empresa.

El objetivo de la visión es Inspirar: ¿Cómo ves a tu emprendimiento en el futuro?

Por ejemplo, en el caso de mi emprendimiento de joyas, la visión la definí como:

“Ser el principal punto de referencia en República Dominicana y el Caribe al hablar de joyería moderna y de calidad con inspiración en el espíritu caribeño”.

Esta frase describe mi sueño. Por supuesto que en este momento no estoy ni cerca de ser un punto de referencia importante en el diseño de joyas en El Caribe, pero es mi norte y si no lo defino nunca lo podría alcanzar.

Valores:

Los valores de tu empresa son los principios éticos que guían las decisiones fundamentales de tu negocio. Los valores establecen los principios y límites que van a regir el día a día del trabajo. Indican qué estás dispuesto a hacer y qué no, para lograr tus objetivos. Forman parte de tu cultura empresarial.

El objetivo de los valores es guiar decisiones y conductas.

Por ejemplo, en el caso de mi emprendimiento de joyas, los valores los definí como:

Innovación, Cuidado, Calidad, Balance, Originalidad, Servicio y Compromiso social y ambiental.

Esto significa, por ejemplo, que, frente a la decisión de escoger entre dos materiales similares con calidades diferentes, debo tratar siempre de optar por la mayor calidad que me permita un costo adecuado. Como código de conducta, no debo sacrificar calidad en los materiales. Igualmente, si un cliente me pide que replique una pieza que vió de otro diseñador, es un trabajo que no debería aceptar, puesto que no es original. Si me ofrecen un material que ha sido obtenido en condiciones de explotación (como ocurre con muchas minas, por ejemplo), no debo adquirirlo, mis proveedores deben siempre estar certificados como “Fair Trade”.

Esta primera sección de nuestro plan esencial de negocio, entonces, refleja la esencia de tu emprendimiento, tu por qué. Quiénes somos y cómo afrontaremos el camino que nos hemos trazado con nuestro emprendimiento para dar respuesta al problema que nos motivó a iniciarlo.

Todas las decisiones deben estar alineadas con esta misión, visión y valores.

La importancia de colocar estos conceptos en blanco y negro, por escrito, radica en que pueden ser claramente comunicados a otros, bien sean nuestros colaboradores, proveedores o clientes, para que todos podamos estar alineados. Si todos conocen y comparten lo que está establecido en el plan esencial de negocio cómo el por qué, todos sabrán el sentido que tiene su trabajo.

Es frecuente que las empresas tengan estos conceptos publicados en sus oficinas, como información, guía e inspiración.

Recuerda, las frases que escribas para esto deben ser:

  1. Cortas
  2. Concisas
  3. Si adornos (sin excesos de adjetivos)
  4. Públicos (no es secreto industrial)
  5. Comunicables

Como referencia, te invito también a leer la misión, visión y valores de este proyecto, puedes encontrarlos en nuestra sección “Acerca de Eslabones de Negocio

Anímate y escribe el Plan esencial de Negocio, comenzando por tu sección de ¿Por qué? Y si deseas, compártela en nuestro grupo de Facebook. Allí podremos conversarlas y darnos mutuo apoyo.

Puedes continuar trabajando con tu emprendimiento en los siguientes tres artículos de esta serie, que responden a las siguientes preguntas del plan:

Imagen propia trabajada en collage digital a partir de fotografía de iStockphoto

Referencias

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